En México, las cámaras de seguridad son parte cotidiana de oficinas, tiendas, edificios y hasta escuelas. Pero detrás de su aparente simplicidad, se esconde una responsabilidad legal que muchas empresas e instituciones desconocen: ¿qué hacer con los videos una vez que ya no son útiles?
Eliminar videos e imágenes de vigilancia no es solo una cuestión de espacio en el disco duro. Hay regulaciones que establecen cuándo deben borrarse, cómo deben eliminarse y qué métodos son válidos para evitar sanciones.
Sí. De acuerdo con la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de los Particulares (LFPDPPP), cualquier imagen o video que permita identificar directa o indirectamente a una persona se considera un dato personal. Esto significa que el uso de cámaras de vigilancia implica obligaciones legales para quien instala y administra los sistemas.
Si las grabaciones contienen rostros, comportamientos, voces, placas vehiculares o rutinas, deben ser tratadas como información confidencial. Su almacenamiento, consulta, transferencia o eliminación están sujetos a reglas específicas, tanto en México como en el ámbito internacional.
A nivel nacional, la principal legislación es la LFPDPPP, que obliga a establecer políticas claras sobre el uso y eliminación de datos personales. En el caso de la videovigilancia, esto incluye definir:
A nivel técnico, se deben considerar normativas internacionales como:
La ley mexicana no establece un plazo único, pero sí exige que el tratamiento de los datos sea proporcional a la finalidad para la que fueron recabados. En la práctica, estos son los plazos recomendados:
Este principio también aplica a sectores como el médico, donde los plazos de conservación de datos clínicos pueden extenderse por razones de salud o procesos legales.
El método más seguro y aceptado para eliminar grabaciones de cámaras de seguridad es el borrado seguro. Esto significa que los archivos se sobrescriben de manera que no puedan ser recuperados por ningún medio técnico.
Existen tres métodos reconocidos por normas como NIST 800-88:
El borrado criptográfico es otra opción avanzada, donde los datos se hacen inaccesibles al eliminar las claves de cifrado.
Muchas empresas creen que al eliminar los archivos desde el panel del DVR o el software de gestión ya están cumpliendo. Pero estos métodos suelen dejar rastros en el disco duro que pueden recuperarse con herramientas forenses.
Solo un borrado certificado puede garantizar que los datos se eliminaron de forma trazable y segura. Además, este proceso genera un reporte de auditoría que puede usarse ante inspecciones del INAI o auditorías internas.
Cualquier empresa o institución que utilice sistemas de videovigilancia debe cumplir con lo siguiente:
Todo esto forma parte de un Sistema de Gestión de Seguridad de la Información, cada vez más necesario en sectores sensibles como salud, educación, banca o retail.
Los riesgos de mantener grabaciones sin control ni protocolos adecuados son altos:
Estos escenarios son más comunes de lo que se piensa. Por ello, implementar un sistema de borrado seguro de metadatos también se vuelve relevante si el archivo es extraído o enviado a terceros.
Hoy existen herramientas que permiten automatizar y certificar el proceso de eliminación. Algunas de las más utilizadas en entornos profesionales incluyen:
Puedes integrar estas funciones dentro de una solución integral de SGSI, con registros, bitácoras y reportes automáticos.
Sí, siempre y cuando exista una justificación legal y se documente en tu aviso de privacidad.
No. Se recomienda aplicar borrado certificado y generar evidencias del proceso.
Sí. La ley mexicana obliga a informar mediante un aviso de privacidad físico o digital en el área vigilada.
Lo ideal es aplicar un borrado físico o criptográfico, según el nivel de seguridad requerido por tu sector.
Delete Technology se especializa en la destrucción segura y certificada de activos digitales, ofreciendo soluciones validadas bajo estándares internacionales como ADISA, NIST y PCI DSS. Esto permite a las organizaciones blindar su información, evitar riesgos y cumplir con la legislación vigente en materia de protección de datos.
Síguenos en nuestras redes sociales
Rafael Chust I Director Delete Technology España y Portugal